6 de junio de 2016

A OLGA Y AL CIMARRÓN (Décimas en reconocimiento a Juan Carlos Gaffoglio y Olga Antognoli)


A OLGA Y AL CIMARRÓN

(Décimas en reconocimiento a Juan Carlos Gaffoglio y Olga Antognoli)


Va mi reconocimiento
como alguien que filosofa,
en esta sencilla estrofa,
sincera, ciento por ciento.
Son con todo el sentimiento
y el mistol de mi emoción,
nacidas del corazón
estas décimas fraternas
hacia el alma pura y tierna
¡de Olga y del Cimarrón!

Los dos son cultivadores
de fiel tradicionalismo
y del rosal del lirismo
florecieron sus amores.
Es que ambos son sembradores
con constancia y con tesón,
del cariño, en plantación,
y aseguro, mientras hablo,
que aparceros del vocablo
¡son Olga y el Cimarrón!

Son dos pájaros cantores
anidando en Ezpeleta,
con la dicha, como meta,
y trinos de ruiseñores.
Cuatro alas de trovadores
vuelan con la presunción
de perdurar en la unión
sin nada que los desvíe,
y la vida les sonríe:
¡a Olga y al Cimarrón!

 Juan Carlos, hombre de oficio,
“el poeta de la cuchara”,
se afirma como tacuara
en el canto vitalicio.
Con versos sin desperdicio,
prodigios de su expresión,
amalgama en construcción
cal, cemento y melodías
con ladrillos de poesía:
¡Así es el Cimarrón!

De ella fluye la Palabra
como el fluir del Río Volga,
ella es Antognoli Olga
y al cantar sus versos labra.
Cada vez que el aire se abra
y en él llegue su canción,
mil aplausos de aluvión
acudirán expeditos,
porque es un dúo bendito:
¡el de Olga y el Cimarrón!

En su conducta contemplo
la lealtad de los que sueñan,
y que cada día enseñan
el valor de un buen ejemplo.
Su matrimonio es un templo
de paz y de bendición,
este libro en gestación
lo hicieron con mucho empeño,
y hoy van “COMPARTIENDO SUEÑOS”:

¡son Olga y el Cimarrón!

Rubén Sada, 05 de junio de 2016, en La Plata.
Presentación del libro COMPARTIENDO SUEÑOS de Juan Carlos Gaffoglio y Olga Beatriz Antognoli


2 de junio de 2016

EL LIENZO DE LA VIDA (Soneto)

Velázquez - La Fábula de Aracne o Las Hilanderas (Museo del Prado, 1657-58)

EL LIENZO DE LA VIDA (Soneto)

Con el tipo de hilo en que se trencen
los tejidos del lienzo de tu vida,
podrán ser curación a tus heridas
bellas vivencias que a lucir comiencen.

Para vestir jornadas que compensen
las horas de aspereza ayer vividas,
no uses telas de férrea entretejida,
pues las más suaves y sedosas vencen.

Trenza con hilos de algodón y seda,
con linos blancos acaricia tu alma,
con suaves fibras que le brinden calma

a la armadura que a tu piel hospeda.
Desnúdate de tu áspera coraza
vistiendo días suaves como gasa.

©Rubén Sada – 2 de junio de 2016.



 

Con fecha 31 de agosto de 2018, el soneto "EL LIENZO DE LA VIDA" de Rubén Sada fue premiado para la convocatoria "El Diario De Los Poetas" en la sede del Senado Nacional de la Rep. Argentina.


28 de mayo de 2016

MUERO DE AMOR Y REVIVO


MUERO DE AMOR Y REVIVO


Cada vez que el sol se apaga
muero de amor en tus brazos,
y revivo en los ocasos
de aquella penumbra vaga.
Cuando tu boca me traga
dentro tuyo me repliego,
y me acrisolo en tu fuego
y entre mis cenizas surgen
mil deseos que me urgen
cada vez que a ti me entrego.

Muero de amor en tu pecho
cada vez que tú me abrazas,
mi machismo despedazas
entre tu contorno estrecho.
Cuando habitamos el lecho,
mientras mi pulso agoniza,
perezco ante tu sonrisa
renaciendo entre tu abdomen,
y en suaves roces que asomen
nuestro amor se profundiza.

Cada vez que en ti sucumbo
dentro tuyo me confino,
soy tu huésped, tu inquilino,
y me haces perder el rumbo.
Me alzo erguido y me derrumbo,
muero en tu labio de rojo,
soy como un simple gorgojo,
me alimento de tu fécula,
tengo un sitio en tu molécula
y ante tu encanto me encojo. 

Muero de amor y en ti yazco
profundamente en tu tierra,
y mi semilla se entierra,
crece en ti, brota y renazco.
Cada vez que te complazco,
flotamos en el nirvana, ([1])
de tus poros de hembra humana
se desprenden, a la par,
fragancias del azahar
de tu piel hesperidiana ([2]).

Mi sombra en ti está sepulta,
sincera, desnuda y pálida,
y renazco cual crisálida
mientras mi piel se me abulta.
Estar en ti me faculta
para poderte decir
que en sensorial seducir
contigo quiero fundirme,
y así mi alma te confirme:
“¡MORIR DE AMOR ES VIVIR!”

© Rubén Sada. 26/05/2016.


([1]) Nirvana. Estado de suma relajación y serenidad.
([2]) Hespérides. En la mitología griega, las Hespérides (en griego antiguo Ἑσπερίδες) eran las mélides (ninfas de árboles frutales) que cuidaban un maravilloso jardín en un lejano rincón del occidente. Según el poeta griego Estesícoro, en su poema “Canción de Gerión”, y el geógrafo griego Estrabón, en su libro “Geografía”, estaban en Tartessos, un lugar situado en el sur de la península IbéricaApolonio de Rodas, por su parte, situaba el jardín cerca del lago Tritón, en Libia. Para la época romana, el Jardín de las Hespérides había perdido su lugar arcaico en la religión, reduciéndose a una convención poética, forma en la que fue resucitado en la poesía renacentista, para aludir tanto a un jardín como a las ninfas que moraban allí. (Fuente: Internet).
Hesperidio: Género de plantas que incluye a los cítricos, por identificarlos con las manzanas de oro del Jardín de las Hésperides. Fruto carnoso de corteza gruesa, dividido en varias celdas por telillas membranosas; ejemplos: la naranja y el limón. (Fuente: Diccionario de la Real Academia Española).


11 de mayo de 2016

JUEVES DE LA ETERNIDAD



JUEVES DE LA ETERNIDAD

A nuestras caminatas de amor.(Año 1981-1982)

Desde el fin del mundo vengo
con la estrella que me guía,
a entregarte esta poesía
que gracias a ti aquí tengo.
Sin alcurnia ni abolengo
humildes letras te anegan,
mis manos tu ser navegan
caricias de tiempos breves…
¡por fin ha llegado el jueves!
y mis alas se despliegan.

¡Cuán hermoso es abrazarte
aunque sólo sea un momento!
Me haces flotar como el viento,
mi tesoro es encontrarte.
Porque sos una obra de arte,
posees todo el encanto,
y elevo al cielo este canto
para decirte, amor: ¡gracias!
Estar contigo me sacia,
ni te lo imaginas, ¡cuánto!

Cuando mi cuerpo te roza
contorneando tus relieves,
siento que cada día jueves
la vida es maravillosa.
Mi caminar se alboroza
y mis piernas van veloces
a disfrutar de los goces
de tu compañía eterna,
porque sos hermosa y tierna
y haces que mi alma rebose.

Cada jueves que te encuentro
en mis promesas me afinco,
y corro en las calles, brinco,
porque te llevo en mi adentro.
Sos fuego, sol, calor, centro,
pues felicidad promueves,
derrites todas mis nieves
entibiándome los días,
renovándome energías…
¡Gracias a Dios, hoy es jueves!

Rubén Sada. 12/05/2016.

El día "jueves" toma su nombre del latín «[dies] Iovis» ‘[día] de Júpiter’. Tiene relación con «jovial» ‘alegre, festivo’ (del latín tardío «Ioviālis» ‘perteneciente a Júpiter’). 



10 de mayo de 2016

EN NUESTRO BULEVAR


EN NUESTRO BULEVAR


Sé que han puesto rosas para ti
en el bulevar.
Siento los jazmines perfumar
en el bulevar.
Rayitos de sol florecerán
en el bulevar.

Todos nos esperan en nuestro bulevar.
Unos pajarillos beberán líquido cristal.
Bellas mariposas volarán y se posarán
sobre ti, mi hermosa flor de este bulevar…

Con dulces miradas nos amaremos,
unidas nuestras manos pasearemos,
allí en nuestro banco te quiero besar…
la vida nos espera en nuestro bulevar.

Todos nos esperan en nuestro bulevar.
Unos pajarillos beberán líquido cristal.
Bellas mariposas volarán y se posarán
sobre ti, mi hermosa flor de este bulevar…

(♪♫♬) 

Todos nos esperan en nuestro bulevar.
Unos pajarillos beberán líquido cristal.
Bellas mariposas volarán y se posarán
sobre ti, mi hermosa flor de este bulevar…

Con dulces miradas nos amaremos,
unidas nuestras manos pasearemos,
allí en nuestro banco te quiero besar…
la vida nos espera en nuestro bulevar. 

© Rubén Sada - 03-9-1981.
Música: Luis Rosarno.





4 de mayo de 2016

EQUIPO DE GUARDAVIDAS (Poema en décimas, dedicado a Luis Rosarno)


EQUIPO DE GUARDAVIDAS
 
A Luis Rosarno


“Vocación que guarda vidas”,
mi definición se explaya:
Toda playa que sea playa
necesita un guardavidas.
Ante una arena embebida
de vientos y fresco mar,
es “sol” que ha de fulgurar,
firme allí tu centinela
marcha, corre, nada, vuela,
alerta para salvar.

Él es médico, doctor,
es erudito enfermero,
es hospital, es bombero,
asistente y celador.
Un experto nadador
más rápido que la luz,
veloz como el avestruz
y en el agua es un delfín,
es tu ángel, querubín,
tu particular Jesús.

Vista de águila, vigila
cada uno de tus pasos,
su ambulancia son los brazos,
y hasta su pulmón te alquila.
Su intrepidez no vacila
ante el líquido que enfrenta,
con bravura que alimenta
su aptitud de ir al rescate,
y ni aún si el mar lo embate
se acobarda ni amedrenta.

En pacíficas jornadas,
si nadie pide “socorros”,
los goles de unos cachorros
entretienen su mirada.
Ninfas bellas y curvadas,
rubias, castañas, morenas,
estampan en las arenas
las pisadas de mujer,
sus risas llegan a ser
cantos de hermosas sirenas.

Con el sol tiene amistad,
entre ellos dos se respetan,
y las aguas que los retan
refuerzan su afinidad.
La costa es la propiedad
en la que su afecto flota,
como vuelo de gaviota
al horizonte y su tedio,
él está allí en el medio:
¡ningún viento lo alborota!

Bandera azul es mar bueno,
negra-amarilla dudoso,
negra-roja es peligroso,
roja es prohibido pleno.
Si hay un relámpago o trueno,
negra y rayo es retirarse
sin protestar ni quejarse,
blanca es un niño extraviado,
banderín que él ha izado
debe siempre respetarse.

Conductor de prevenciones,
te doy “GRACIAS” porque existes,
pues con tu coraje asistes
al peligro en que te expones.
Cantor de bellas canciones,
vocación de quien nos cuida,
su vicio es guardar la vida,
servicio de “guardaalmas”,
aquí te estrecho mi palma:
¡EQUIPO DE GUARDAVIDAS!

Rubén Sada. 04-05-2016




26 de abril de 2016

ENCOMIENDA DE BESOS (Soneto de amor)


ENCOMIENDA DE BESOS


Tengo un paquete de besos que enviarte,
tú dime a qué dirección te los remito,
si a tu boca o a tu rostro, tan bonito,
mas no me prives de esos besos darte.

Dime, cariño, adónde o a qué parte
debo enviarte mi amor en paquetito,
pues es tu nombre que allí figura escrito
y eres tú destinataria de mi arte.

Que nada exista que tu amor suspenda,
acéptame este envío como ofrenda,
recíbela con ganas y atención.

Estate atenta al llegar de mi encomienda,
que es muy sincera, espero te sorprenda,
pues te la envío directo al corazón.

Rubén Sada. 26-04-2016

QUISIERON ACOBARDARME


QUISIERON ACOBARDARME

"Estamos prisioneros, carcelero. Yo, de estos torpes barrotes; tú, del miedo".
[Coplera del prisionero] 
(Armando Tejada Gómez-Horacio Guarany)



Quisieron acobardarme
“como a un pájaro sin luz”
pero yo cargué mi cruz:
¡no pudieron doblegarme!
Aún a costa de encerrarme
en la oscuridad total,
pude librarme del mal
y así conservé mi vida,
no es cobardía la huida
si demora su final.

De “antipatria” me acusaron
los que hoy, desde su tumba,
con olvido que retumba
mi fe y conciencia impugnaron.
En vano me encarcelaron
cual vanas bromas macabras,
una oveja entre las cabras
estaba libre, aunque presa,
y era mi munición gruesa
¡el poder de las palabras!

Muchas veces caminaba
con un fusil en la sien,
pensando “en un santiamén
mi cerviz será agujereada”.
Mas, yo siempre procuraba
salvaguardarme la vida,
y en ascenso o en caída
fui leal a mis principios
esquivando rocas, ripios,
hasta encontrar la salida.

Todo mal momento pasa,
todo temporal termina,
lo que el inicuo maquina
puede triunfar o fracasa.
Pero porque mi coraza
es de alma de acero y hombre,
porque tiene amor su nombre
y es de justicia su temple,
no hay nada que la destemple:
¡y haré que mi fuerza asombre!

Enfrentaré adversidad
aunque esta misma me arrastre,
volteando pesado lastre
cual David contra Goliat.
Esgrimiré la verdad
aunque el inicuo me ahorque,
no temo a la muerte porque
la enfrenté en impavidez,
le temo a la estupidez,
que es el más pesado torque.

Muchas historias poseo
en el núcleo de mi alma,
mil poesías en mi palma
reafirman lo que yo creo.
Mi haber, después de un arqueo,
cuando reviso mi archivo,
da un balance positivo,
no hay temor en mi ADN,
mi paso no se detiene
mientras siga estando vivo.

Por eso, yo de “cobarde”
no he conseguido el título,
falta el último capítulo
antes del fin de mi tarde.
No quisiera hacer alarde
mas no me doy por vencido,
mi bote no ha sido hundido
ni paré de navegar…
no dejaré de remar
aún con callos o aturdido.

Quisieron acobardarme
y aquí estoy, contando el cuento,
los malvados en su intento
ya no pueden obligarme.
Es momento de afirmarme
aferrándome a la vida,
con buen orden y medida
protegiendo mi salud,
seguro tendré un alud
de bondad inmerecida.

Rubén Sada. 26/04/2016 




Lee más detalles de mi historia en la prisión, debajo de mi poema

25 de abril de 2016

EL LUGAR DE RESIDENCIA DE DON AMOR (Emulando a Juan Ruiz, el Arcipreste de Hita)

Rubén Sada y Arjona Delia en el Monumento a Juan Ruiz, el Arcipreste de Hita,
en el Acueducto de Segovia, España, el 25/06/2014

EL LUGAR DE RESIDENCIA DE 

DON AMOR

(Poema emulando a Juan Ruiz, el Arcipreste de Hita)
 

Paseábase Don Amor por los campos castellanos
y todos se le acercaban para besarle la mano.
Un lugar donde vivir buscaba él mismo en el llano
en medio de tanto barro habitado por humanos.

Le ofrecieron hospedaje todos los hombres honrados:
ricos, pobres, esclavos, nobles, sabios e iletrados…
“Nosotros te ofreceremos lugares bien preparados
si vienes a nuestra mesa como nuestro convidado”.

—Don Amor, sé nuestro huésped…—dijeron, caballerescos.
—Alégranos nuestros días, nuestro vivir canallesco.
Te daremos la atención de monarca y caballero,
con tal que hallemos vivir muchos días placenteros.

—Señor de los amoríos…—los ancianos lo han llamado…
—Siéntete digno de estar, por favor, a nuestro lado,
ya que en toda la existencia no nos has acompañado,
sea el tiempo que nos queda, ocasión de haber amado.

—Vente presto con nosotros…—le gritaron unos niños,
—porque somos el futuro, nos hace falta cariño.
Protégenos de los males, del hambre y del exterminio,
que el frío, guerra o peligro no halle en nosotros dominio.

Como si fuese el cantar de aves desde unas ramas…
—Acude a nosotras, ¡ven!—invitáronle unas damas.
—Alivia nuestros pesares, soluciona nuestros dramas,
ya no hemos de vivir solas y sin nadie que nos ama.

Don Amor, peregrinando, pasó frente a unos cantores,
y a coro lo festejaron, entonándole loores.
—Ven con nosotros— dijeron… —danos letras con amores,
inspíranos bellos cantos, seremos tus seguidores.

Al pasar por Quilmes Oeste, entre pimpollos que nacen,
Don Amor vio a una pareja cuyos corazones placen,
les ofreció un buen futuro impulsando a que se abracen,
y se instaló entre los dos, hizo que se enamorasen.

El joven vivía soñando, sin saber en qué momento
llegaría Don Amor con la princesa de un cuento.
Sintió besos en su piel y se puso muy contento,
y bailaba por las calles con loco enamoramiento.

Soñando estaba la joven, la más hermosa doncella,
que algún día un caballero la descubriera tan bella,
suplicando día y noche al cielo y su buena estrella
que el esperado momento los ponga en la misma huella.

Y DON AMOR RESIDIÓ EN ELLOS.


Rubén Sada. 13 / 06 / 1981.

23 de abril de 2016

COMO UNA FLOR


COMO UNA FLOR (SONETO)

A Delia

Como una flor, florece mi soneto
y evapora perfumes de poesía,
con versos que humedecen la sequía
y hacen azul-celeste el cielo preto.

Estos catorce pétalos completo
con colores que adornan la grafía,
con métricas y rimas de armonía
y florecieron ya los dos cuartetos.

La vista más hermosa de mi vida
es la flor de tu amor, que siempre tuve,
flotando enamorado en una nube.

Y el alma estará siempre agradecida
pues sos mi poesía más hermosa:
¡Ya que sos más bella que una rosa!

Rubén Sada. 25/08/2015.

Con tu visita yo vibro./ Tu regalo apreciaré,/y te obsequiaré mi libro/ si me invitas un café.

Invitame un café en cafecito.app